Se acabó la temporada oficial y ya han pasado unos días del Campeonato de España Infantil (Masculino y Femenino). Ahora es un buen momento para sacar conclusiones. Si somos “resultadistas” no podemos calificar de buena la actuación de nuestros equipos (20 fem. Y 21 masc. en la clasificación de sus respectivas competiciones) pero esa sería una visión muy pobre y partidista para valorar una temporada. Me explicaré:
Ser Campeón de Baleares y participar en un Campeonato de España es un experiencia que nadie olvida pero, a la vez, puede ser un arma de doble filo. Por lo general, si los resultados son positivos se crea automáticamente un clima de auto-confianza que nos hace creer en nosotros mismos/as, en nuestro trabajo, en nuestros compañeros/as, en nuestros entrenadores, en nuestro club, etc.
El problema puede venir cuando los resultados no son todo lo buenos que esperábamos: entonces (aunque no siempre), esas sensaciones pueden cambiar y todo parece derrumbarse como un castillo de naipes. Dudamos absolutamente de todo y la confianza da paso al pesimismo, al malestar, a la frustración. Tener esos sentimientos es lógico y natural cuando la presión es máxima y la cosas no salen como esperábamos.
La verdad es que no podemos solo quedarnos con esa visión: las cosas se ven mejor desde fuera, desde la distancia, las diferentes valoraciones no pueden hacerse en caliente y tomando como referencia la última participación en un campeonato. Desde el club estamos MUY ORGULLOSOS de todos/as vosotros/as y lo que es más importante: vosotros/as también debéis estarlo. Tanto chicos como chicas habéis mejorado muchísimo esta temporada, es más, ni tan siquira parecéis los mismos/as jugadores/as que en septiembre del 2010, habéis conseguido ser los mejores de Baleares y si bien es cierto que el Campeonato de España ha sido muy duro debemos analizarlo absolutamente todo. Entonces la conclusión es claramente positiva, muy positiva y la experiencia peninsular debe sevirnos para ampliar horizontes, para aprender y para motivarnos a seguir mejorando. Ya sabemos que hay volei (y del bueno) fuera de las Islas, en vuestras mentes ya tenéis un referente, un ejemplo, un modelo a imitar y un nivel técnico, táctico, físico y mental que debemos tratar de alcanzar (eso sí, debe ser una intención pero nunca una obsesión)
Desde el club repetir que estamos muy orgullosos de vuestra temporada y más aún de vuestra trayectoria. Ahora sólo queda seguir, seguir y seguir trabajando. ENHORABUENA